22 Septiembre 2012, 12:01 PM

La conducción irresponsable se agrega a la anarquía del tránsito en  Santiago

Las quejas de los usuarios son constantes por la inobservancia al cumplimiento de la Ley 241, sobre tránsito terrestre, que regula la circulación y conducción de vehículos

SANTIAGO.   Ni siquiera había aprendido a conducir un vehículo a su corta edad, pero murió atropellado por un “supuesto chofer” que aunque tampoco sabía guiar, se desplazaba en un automóvil  por las calles,   arriesgando la vida de quien  le pasaba  por delante.
Esta es una escena, que por lo menos en este país, se ha grabado varias veces y los  protagonistas son jóvenes estudiantes, hombres que salían a buscar el sustento de sus familias y niños que salían a jugar;  éste es el público favorito de estos  “conductores”.
Y aunque existe una frase que dice que la experiencia de unos sirve  para hacer reflexionar a otros,  al parecer éste no ha sido el caso de esos choferes irresponsables que andan por las calles sin conciencia de que lo más importante es la vida humana. Hay quienes sin lugar a dudas deberían portar en sus vehículos un letrero bien visible que advierta “peligro, irresponsable a bordo”.
La ley 241,  de Tránsito Terrestre,  en su artículo 32  apartado c, establece que se consideran inhabilitados para el manejo de vehículos de motor aquellos que tengan muy disminuida capacidad de concentración, quienes presenten problemas nerviosos, problemas en la visión, así como los que presentan una marcada predisposición a la fatiga,  condiciones que bien podrían encontrarse en cualquier persona que conduzca en el país.
La referida ley también establece que la velocidad de un vehículo debe regularse con el debido cuidado, teniendo en cuenta el ancho, tránsito, uso y condiciones de la vía pública  y se considera como límite máximo en la zona urbana, 35 kilómetros por hora.
Asimismo, el artículo 93 sanciona el conducir en estado de embriaguez, con prisión de un mes a tres meses.
Aunque según informó la magistrada Luisa García,  del Tribunal de Tránsito de Santiago, el Ministerio Público siempre solicita como sanción, multas  para quienes  infringen la Ley.
Sin embargo, según opinaron algunos residentes en esta ciudad,  “lo que hace falta es conciencia en todo aquel que se hace llamar conductor”,  lo  que por cierto  según la Ley 241 hace alusión  a “toda persona que dirige, maniobra o se halle a cargo del manejo directo de un vehículo durante su utilización en la vía pública”.
José Prieter  dijo que la gente debe pensar en el otro cuando va a manejar un vehículo “si no aman su vida, que por lo menos no arriesguen la de aquel que sí la ama y que está luchando por salir adelante”.
Josefa González coincidió con esta afirmación y dijo que esta situación  en que un chofer irresponsable arrastra a la muerte a ciudadanos con todo el deseo de vivir,  es una evidencia de que el que no ama su vida mucho menos va a cuidar o tratar de preservar la de otros.
Indicó que también esta situación es producto de que muchas personas quieren llevarse el mundo por delante, conducen como locos tratando de cumplir con todo, la faena, el deseo de obtener  dinero rápido, que como dijo  “al final terminan en tragedia”.
Estela Díaz dijo que la gente debe concientizarse, dejar la prisa cuando van a conducir algún vehículo  puesto que así se  evitan muchos accidentes de tránsito. 
 Un caso
María aún recuerda ese sábado en la tarde, cuando junto a su hijo de siete años se dirigía a su casa en la comunidad de Tamboril, cuando un hombre en un vehículo  pesado conducía  a toda velocidad y “no me dio tiempo a nada sólo lo vi cuando ya venía prácticamente encima de nosotros”.
Afortunadamente, María vivió para contar esa trágica escena, pero su niño  no corrió con la misma suerte y murió en el hecho.
Las investigaciones arrojaron que el conductor estaba en estado de embriaguez y, además, conducía a alta velocidad en la vía pública.
 El más reciente
El caso más reciente ocurrió  esta semana en la localidad de Ranchito,  La Vega, donde cinco personas murieron y tres se encuentran en estado de gravedad, tras haber sido atropellados por el conductor de una yipeta, que según contaron los que vieron el hecho, conducía a alta velocidad, lo que provocó que perdiera el control  y se llevara todo lo que encontró a su paso.
UN APUNTE
Tribunales y leyes
Los Tribunales de Tránsito han sido habilitados en cada provincia, para registro de los accidentes y conciliación entre las partes, pero los casos más frecuentes son de aplicación de multas por infracciones, lo que es usado como medio de recaudación de ingresos estatales.